miércoles, diciembre 23

Los 7 pecados capitales en el Inbound Marketing.


Envidia 


o  Miro a la competencia con envidia y me comparo sin tener en cuenta que:

-      Llava más tiempo en el escenario digital.
-      Tiene más presupuesto dedicado al online.
-      Ha desarrollado un equipo con habilidades en el digital.
-      Conoce sus "buyers persona". 




La Ira

o  La Ira que provoca la impaciencia. No ver los resultados que quiero ver en el tiempo que quiero verlos. La evolución SEO necesita su tiempo.
o   La Ira que provoca la “curva geométrica” en el resultado de una estrategia Inbound, acostumbrados a “comprar demanda”.
o  La ira que provoca el “oh shit momento” al comprobar el CPA (coste por adquisición) al que realmente puedes llegar vs  el CPA del outbound. 


La lujuria

o  Al Inbound marketing de le llama también marketing de atracción…con la seducción.... pero no te pases. Hay muchos que “mal interpretan” y pasan de la “atracción” a ser un poco “spammers”. La línea que separa ser spammer o no es más fina de lo que parece.
o  Agencias de Inbound marketing que te “revientan” el correo…. ¿Qué recomendarán a los clientes para los que trabajan?.
o  Que la Automatización no acabe con la libido  de tu cliente.
o  Cross selling y up selling SÍ….., pero cuidado con ser demasiado vehemente.


Pereza

o  La pereza a  la hora de enfrentar una metodología rigurosa y una ingente pila de tareas en las cuales agencia y cliente han de TRABAJAR DE LA MANO.
o  La pereza que provoca hacer cosas nuevas como:
-      Redefinir tus audiencias.
-      Generar contenidos que no hablen de tu marca sino que enamoren
-      Conversar con ellos de manera segmentada e inteligente.
-      Adquirir compromisos de consecución de objetivos y medir, medir, medir.
-      Que tu agencia “te haga trabajar” más que nunca.




La Soberbia

o  Soberbia al pensar que lo que haces te está funcionando bien y que no es necesario transformar nada. (probablemente te estés cociendo a fuego lento).
o  Soberbia al pensar que tu producto es demasiado bueno y  el posicionamiento de tu marca es “mejor” como para que “ese” nos pueda robar cuota de mercado.
o  Soberbia al pensar que todo el trabajo lo tiene que hacer la agencia por que es a lo que estoy acostumbrado. Cuando en este modelo la implicación de tu equipo es crucial. (Además de aprovechar una oportunidad: absorción y transferencia de conocimiento)



La gula

o  Querer olvidarme de todo lo que hago para pasar al Inbound de manera desproporcionada.
o  Soy un talibán del Inbound maketing y todo lo que no sea “Inbound” huele a rancio.
o  No saber alternar un mix de acciones Inbound y outbound.


Avaricia

o  Quiero abarcar más de lo que puedo. El marketing, como la vida, es elegir. No podrás llegar a todo.
o  Perder el foco de tu territorio y adentrarte en mercados en los que te costará ser relevante.

o  Mantener la absurda creencia de que con Internet “todo lo puedo”. Empieza poco a poco. El “alcance” del proyecto es crítico. Debes Atacar una audiencia y tras conquistarla, atacar a otra y luego a otra igual a nivel geográfico. Aquí aplica muy bien el famosos refrán “quien mucho abarca, poco aprieta”.