miércoles, marzo 21

Exceltur insta a Benidorm a vender magia e ilusión

Tendréis que reconocer que esta declaración del mediático lobby Exceltur apela con contundencia al marketing emocional. Además de magia e ilusión, Zoreda apunta a utilizar como ejes de posicionamiento del Benidorm, la experiencia y calidad de vida, evitando centrar la batalla en el precio. Estas son las claves según Exceltur para combatir la competencia que suponen los destinos emergentes. Yo desde luego no puedo estar más de acuerdo con este planteamiento. Me gusta que no se hable sólo de cifras, de infraestructuras y de coyunturas. Deberíamos hablar también de sueños, de magia, de ilusión….de experiencias. Esto me suena a cliente 5i, a dreamketing, a marketing experiencial...me gusta.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo, pero parece mentira que aún tengamos que reconocer estas cosas, cuando debería estar ya en nuestro subconsciente. España o vende este tipo de conceptos o no tiene nada que hacer compitiendo a precio. Lo que se debe es llevar al terreno de los mortales los conceptos de marketing de las emociones (concepto del que se nos llena la boca pero que pocos aterrizan). Las personas son al fin y al cabo los responsables de generar experiencias a nuestros clientes. Nos preocupamos de nuestros profesionales, somos capaces de reconocer que son tan o más importantes que nuestro clima/playas/oferta complementária, etc..
La experiencia no esta solo en las infraestructuras y en los canales de comunicación, si no principalmente en los prestadores del servicio a los cuales se obvia en muchas ocasiones.Estoy totalmente en la línea del concepto de las emociones pero aterricemos esto a la realidad de nuestros destinos, empresas.....

Anónimo dijo...

bla, bla, bla... como siempre, más de lo mismo.

Tratar de convertir lo intangible en tangible es tan ilusorio como ir al Mercadona y llenar la bolsa antes de que acabe la cajera de pasar los productos por el scanner.

Señores y señoras, la magia y la ilusión es la capacidad que deben tener los empresarios para valorar a sus trabajadores y que el servicio prestado a los visitantes sea un éxito.

Y Benidorm hace muchos años que perdió esta perspectiva.

¿Por qué tratar de convertir a la rana en príncipe de nuevo si nunca llegará a ser lo que fue?

Dejémos de cuentos, y pasemos a la acción. ¿es Benidorm un destino turístico o un destino vacacional?

Hagan sus apuestas.

Anonymous dijo...

Totalmente de acuerdo, pero parece mentira que aún tengamos que reconocer estas cosas, cuando debería estar ya en nuestro subconsciente. España o vende este tipo de conceptos o no tiene nada que hacer compitiendo a precio. Lo que se debe es llevar al terreno de los mortales los conceptos de marketing de las emociones (concepto del que se nos llena la boca pero que pocos aterrizan). Las personas son al fin y al cabo los responsables de generar experiencias a nuestros clientes. Nos preocupamos de nuestros profesionales, somos capaces de reconocer que son tan o más importantes que nuestro clima/playas/oferta complementária, etc..
La experiencia no esta solo en las infraestructuras y en los canales de comunicación, si no principalmente en los prestadores del servicio a los cuales se obvia en muchas ocasiones.Estoy totalmente en la línea del concepto de las emociones pero aterricemos esto a la realidad de nuestros destinos, empresas.....